Entre frío, pingüinos en moto y otras hierbas, CNT de Valladolid estuvo en pie por una hostelería digna el sábado 14 de enero frente al Lizarran de Poniente, denunciando el acoso y despido contra una compañera en Jerez. Dos furgonetas de antidisturbios intentaron intimidar al piquete solidario.
A las 21.30 del sábado 14 de enero la CNT de Valladolid formó un piquete solidario frente al restaurante de la cadena Lizarran en la Plaza de Poniente para denunciar el despido de una compañera en Jerez.
Unos 15 integrantes de CNT de Valladolid estuvimos allí denunciando el acoso y despido contra la delegada de este sindicato en el Lizarran del centro comercial Área Sur de Jerez.
El normal desarrollo de esta acción de protesta se vio alterado por un desproporcionado despliegue policial: dos furgonetas de antidisturbios que se hicieron notar en área tan concurrida y que intentaron intimidar a los miembros del sindicato.
La actuación policial contrastó con las muestras de comprensión que los viandantes dedicaron a las demandas del sindicato por una hostelería digna.
Esta acción se integra en las movilizaciones por una hostelería digna que CNT está impulsando desde todas sus sedes. El sindicato hace un llamamiento a todos los trabajadores del sector para dar el paso de perder el miedo, asesorarse y plantar cara a las malas condiciones laborales.
En el caso de la hostelería es frecuente encontrar contratos fraudulentos -dando altas por menos horas que las reales-, usurpación de días de descanso e incumplimiento de convenios. A mayores, las empresas maniobran contra trabajadoras y trabajadores que reclaman sus derechos. Este es el caso de la compañera de Jerez que CNT ha denunciado frente a las puertas de Lizarran, en Valladolid y en otras ciudades.
Lizarran de Jerez no es un caso aislado. Las movilizaciones que tienen lugar a lo largo del Estado por una hostelería digna buscan resolver todos los casos de abuso laboral en la hostelería que llegan a conocimiento del sindicato, tomando las medidas legales oportunas y aplicando el método de denuncia pública mediante la acción directa.
La victoria en estas luchas particulares puede convertirse en una victoria para todo el sector de la hostelería y puede evitar que el ocio de nuestros vecinos dependa de abusos laborales.
Este es sólo el primer acto de la campaña por la #HosteleríaDigna en Valladolid. A pesar de la intimidación policial que ha sufrido hoy, el sindicato convocará en breve nuevos piquetes solidarios; además, prepara la denuncia de abusos similares que se están produciendo en nuestra ciudad.