Ya está disponible para todo aquel que quiera hacer uso del periódico «cnt» nº 378 correspondiente al mes de Mayo de 2011. Al precio de 1,5€ en los diferentes sindicatos o bien por internet.
En este número destacamos las siguientes noticias en portada e interiores:
Portada // 1º de Mayo, la lucha está en la calle / Telefónica: ERE para los empleados, bonus para los directivos / Entrevista al abogado Gonzalo Boye acerca de las agencias de rating
Gaceta sindical // Victoria en el conflicto contra la Biblioteca Nacional y la empresa Indra
Gaceta económica // El lado oscuro del mercado eléctrico español
Global // Se reavivan las luchas laborales en Egipto
Memoria e Historia // 80 años de la huelga anarcosindicalista en Telefónica
Actualidad // Comienza la organización ciudadana contra la impunidad de los bancos
Opinión // Negociación colectiva o la fuerza de la clase trabajadora
Cultura // Entrevista al artista Santiago Sierra
Contraportada // Entrevista a Paca Blanco, de Ecologistas en Acción
::: Para visionarlo on-line :::
A continuación reproducimos la editorial que para este mes ha elaborado el Secretariado Permanente del Comité Nacional:
Por una unidad de acción
Un año más celebramos una fecha significativa, sin embargo este año guarda la diferencia respecto a los últimos de que en esta ocasión llegamos al Primero de Mayo soportando a nuestras espaldas una oleada muy concentrada de recortes antiobreros sin apenas precedentes en las últimas tres décadas. Desde la CNT entendemos que la desmovilización de los trabajadores no es un factor meramente casual sino que responde a causas estructurales: cuando el método de organización en las empresas seguido de forma mayoritaria pasa por un modelo sindical de representación (el fijado en el ET y la LOLS, que hace recaer su peso sobre las elecciones sindicales, los delegados de personal y los comités de empresa), un modelo en el que se protege fuertemente contra el peligro del despido a una clara minoría (la que resulta elegida como representante) dejando al resto en situación de mayor exposición al problema del paro, resulta lógico que ese resto de los trabajadores prefiera no moverse y tienda de manera natural a dejar en manos de la minoría todos los asuntos relativos a sus condiciones de trabajo.
Nadie dice que el éxito esté garantizado, pero lo cierto es que no podemos seguir como venimos estando hasta ahora. Tanto en el pasado reciente como en el presente, hemos visto muchos despidos y sanciones que respondían a represalias contra trabajadores movilizados convertirse en nulos, incluso hemos visto a empresas sentarse a negociar la concesión de la garantía laboral (es decir, la extensión de la protección frente al despido a toda la plantilla) u otro tipo de mejoras, todo ello fruto de una acción sindical bien planificada y desarrollada, siempre bajo la máxima de que el sindicalismo no puede ser algo ajeno a la clase obrera, y no puede por lo tanto sustentarse en privilegios. Hemos visto éxitos como el de la huelga de Flightcare en el Aeropuerto del Prat, donde la empresa ha visto frustrados sus intentos por ilegalizar los paros convocados por la CNT, y asistimos en estos momentos a una nueva huelga convocada también por la CNT en la empresa AUSSA, precisamente reivindicando entre otras cosas la retirada de un Expediente de Regulación Temporal de Empleo y la concesión de la mencionada garantía laboral. Hemos visto cómo empresas del calibre de Eulen han sido obligadas a cambiar el convenio que venían aplicando a sus trabajadores por otro con mejoras notables sobre el anterior, o cómo un largo etcétera de empresas se han visto obligadas a cambiar su política de contratación, o a subsanar cesiones ilegales de trabajadores… siempre con el modelo sindical que propone la CNT como común denominador.
Por todas estas razones, hoy más que nunca es necesaria la unidad de acción de todos aquellos que rechazamos el pacto social, pero también es hoy más necesaria que nunca la revisión autocrítica del modelo sindical que nos ha conducido a todos los trabajadores a este callejón sin salida.
POR EL SINDICALISMO DE CLASE, ECONÓMICAMENTE INDEPENDIENTE Y DE ACCIÓN DIRECTA
VIVA EL PRIMERO DE MAYO