Durante el mes de septiembre ya se empezaron a oír noticias de la ruptura de las negociaciones del Convenio del Metal donde la patronal del sector Vametal, proponía entre otros puntos congelación salarial, flexibilidad laboral de 250h al año, 16h más de trabajo al año, eliminar la subrogación del convenio. A partir de este momento UGT y CCOO deciden optar por las movilizaciones para presionar a la Patronal y como ya estamos acostumbrados lo hicieron “a su manera”.
El 29 de septiembre celebraron dos asambleas en sus locales una a las 10.00h y otra las 18.00h, -a cada una de las cuales acudieron una treintena de delegados de UGT y CCOO, algunos afiliados de CNT y debido al horario muy pocos trabajadores/as-, donde se ratificó el calendario de movilizaciones presentado por los secretarios de estos sindicatos, dentro del cual había una asamblea general del sector en un Centro Cívico el 14 de octubre, una manifestación el 19, un paro de dos horas el día 17 y seis días de huelga repartidos en cuatro semanas comenzando el día 20. CNT mostró por activa y por pasiva su disconformidad con la forma de convocar las movilizaciones y el poco tiempo que había para calentar el ambiente.
CNT Metal decide apoyar y secundar las movilizaciones dentro de nuestras posibilidades, aún teniendo claro que no íbamos a tener ningún tipo de información por parte de los convocantes. A partir de ahí, y con un plazo de tres semanas había que calentar el ambiente en las empresas. Hubo delegados sindicales que hicieron bien su cometido pero también hubo muchos otros que boicotearon la huelga. Para CNT Metal la asamblea era la parte fundamental para sacar adelante la huelga, por eso decidió intentar que a la asamblea acudieran el mayor número de trabajadores/as para que así se creara una base sólida y a tal efecto sacamos un coche con megafonía por los polígonos, además de empapelar las zonas industriales de Valladolid y alrededores, ya que lógicamente los sindicatos negociadores querían que esta asamblea fuese un mero tramite. Por su parte Vametal no hizo declaraciones a la prensa hasta que no llegaron los días de huelga, comenzando a amenazar a los trabajadores/as en las empresas, aunque a la vez estaban convencidos del fracaso de los paros, dado el precedente de la huelga General del 29S.
El viernes antes del paro de dos horas del lunes 17 de Octubre, (para nosotros debía de haberse celebrado días antes) estaba convocada la asamblea a las 19.30 en el Teatro del Centro Cívico del barrio de Las Delicias. Primera decepción: solo 150 trabajadores acudieron de unos 7000 que trabajamos en el sector, la gran mayoría de los delegados eran meras comparsas. Como era de esperar fue un monólogo por parte de Jesús Jañez (CCOO) y Atanasio Casado (UGT). Aunque en las intervenciones sí que había gente que quería proponer cosas, todo estaba cerrado y no atendierón ninguna de estas propuestas.
Llegamos al lunes 17 y a pesar de que no había un ambiente de huelga, muchas empresas donde se había “calentado” e informado bien a los/as trabajadores/as, (casi todas eran las más grandes del sector) el paro tuvo un seguimiento alto. En la mayoría de empresas pequeñas el paro tuvo escasa repercusión. Esa mañana a las 8.30 nos concentramos junto con CGT a las puertas de Vametal, acto al que acudimos alrededor de una treintena de personas.
En ese momento la Patronal sorprendida por el seguimiento en estas empresas, empezó a movilizarse para desactivarla, elaborando un protocolo de actuación para todas las empresas que fue muy efectivo. Este protocolo consistía en desacreditar, mintiendo sobre los sindicatos y el punto más efectivo de esa estrategia fue ofrecer pactos de empresa, sin contar con la manida amenaza de la que siempre se han servido. Pudimos constatar el movimiento de fichas de la Patronal, personándose en muchas empresas los mismos negociadores del convenio, para llevar a cabo dicho protocolo anti-huelga. Mientras tanto UGT y CCOO se durmieron en los laureles hasta la manifestación del día 19, viendo indiferentes como muchos de sus delegados aceptaban esos pactos de empresa, en la mayoría de los casos verbales y como otros delegados no supieron hacer frente a las amenazas de los empresarios.
Unas 600 personas acudieron a la manifestación del día 19, CNT Metal aportó un bloque de más de 50 personas. Al concluir se prepararon los piquetes ya que a las 10 de la noche comenzaba la huelga en las pocas empresas con turno de noche. CNT formó un piquete y acudimos a Frenos y Conjuntos y a ARESA (con 230 trabajadores, la más grande donde se aplica el convenio), en el Polígono Tecnológico de Boecillo donde constatamos un seguimiento aproximado del 60%. Para el turno de mañana volvimos a estas dos empresas, y fue curioso el caso de ARESA donde la plantilla estaba dividida a causa de que los miembros del comité de empresa de CCOO sacaron un comunicado en la fábrica diciendo que se había alcanzado un preacuerdo con la dirección para un acuerdo de empresa y que la plantilla ya no secundaba la huelga, pero trabajadores/as de la empresa hicieron piquete y convencieron a muchos compañeros de que la huelga seguía y que ya habría tiempo después para hablar de un convenio de empresa. En estas dos factorías el seguimiento fue bastante alto. Después nos desplazamos al Polígono de Argales donde muchos talleres pequeños estaban funcionando con normalidad, entre ellos Talleres del Olmo empresa de uno de los negociadores, a sus puertas se encontraban cuatro furgonetas de antidisturbios. Entre las empresas que visitamos estaba el concesionario de Hyundai donde tras el buen seguimiento del paro del lunes, la empresaria amenazó a los trabajadores con despidos y toda la plantilla fue a trabajar. Durante nuestra presencia a las puertas del taller, la señora perdió los nervios e incluso hizo el amago de atropellarnos con el coche. Tambien a lo largo de este Polígono Industrial vimos patente el “protocolo anti-huelga” de la patronal. En muchas empresas se negociaban pactos para parar la huelga. A las 12.00h acudimos a las puertas de la sede de Vametal, en una concentración de delegados de UGT y CCOO que no se habían hecho pública y en la que no nos esperaban. Para concluir la jornada convocamos una concentración junto con CGT a las 8 de la tarde, y volvimos a la sede de Vametal.
Tras el paro de dos horas y la huelga de 24h con la consiguiente guerra de cifras, -para Vametal el seguimiento de esta huelga fue del 8% y para los sindicatos del 80%-, UGT y CCOO acuden a la llamada de mediación hecha por parte de la Consejeria de Economía de la Junta de Castilla y León para retomar las negociaciones del Convenio. Rápidamente se apremian a desconvocar la huelga de 48h de los días 26 y 27 para después informarnos a los trabajadores (siempre por medio de la prensa) que han alcanzado un preacuerdo y así desconvocar definitivamente los otros tres días de huelga que tenían convocado. Este preacuerdo que nunca fue ratificado por la Asamblea a diferencia de la convocatoria de huelga donde si que convocaron las tres pseudo asambleas, para así poder quitarse responsabilidad en caso de fracaso, se convirtió en Acuerdo, bastante negativo para los intereses de los trabajadores, el cual contiene los siguientes puntos:
Vigencia para 2011 y 2012
Subida salarial del 0,8% para 2011 y 1,5% para 2012.
Cláusula de Revisión salarial: La perdemos como estaba en el anterior convenio, dado que ahora solo se pagaría la diferencia de IPC hasta el 2% (antes daba igual lo que subiera el IPC) y siempre que este suba mas del 2%.
Descuelgue de las tablas salariales por parte de las empresas: Novedad en el convenio, por tanto aunque la subida sea poca si la empresa presenta un informe de su situación económica la puede dejar en papel mojado. Al no estar todavía redactado el texto del convenio a fecha de hoy, desconocemos quien decide aceptar el descuelgue.
Flexibilidad laboral: Aparece por primera vez en el convenio y será de 88h al año, con las que las empresas podrán variar la jornada de trabajo a su antojo. Para conocer como se aplicara, también hay que esperar al texto completo.
Jornada de trabajo anual: No variara durante la vigencia del convenio de las 1744h de la actualidad. La patronal que quería que trabajásemos 16h mas al año ha cedido en este punto. Nosotros creemos que es porque muchas empresas ni siquiera la aplican, por tanto han preferido dejarlo como estaba y empeorar por otro lado.
Subrogación: A la espera de conocer el texto parece que aumenta algo los derechos de los trabajadores.
Todo esto hasta que no acaben de redactar el nuevo texto y lo publiquen, no sabremos si será peor de lo que ha sido el acuerdo. En CNT creemos que no se debía haber firmado este convenio, que es una bajada de pantalones en toda regla y que por el contrario se tenia que haber intentado relanzar la huelga que estamos seguros que poniendo mas interés por parte de UGT y CCOO podía haber aumentado el numero de huelguistas. Por supuesto Vametal muy satisfecha, como recogen las declaraciones de Eduardo Santamaria (Director general), hechas a la prensa tras hacer publico el acuerdo. Hay que valorar también la falta de implicación de los trabajadores tanto en las asambleas, como en el seguimiento de la huelga, dejando las manos totalmente libres a los sindicatos negociadores a actuar como les venga en gana. Denunciamos la actitud servil con la Patronal de las cúpulas de estos sindicatos , mientras que con los trabajadores/as que estamos implicados con el convenio demuestran un gran alejamiento y falta de interés a que participemos en la organización de las movilizaciones.
Para la CNT de Valladolid esta huelga ha supuesto la vuelta a la participación activa en una huelga de un sector después de muchos años, siendo este uno de los más importantes de la provincia. Nuestro objetivo es que para el 2013, cuando se vuelva a negociar el convenio seamos más y tengamos presencia en más empresas. Para finalizar mucho ánimo a todos los/as trabajadores/as que hicieron huelga, participaron en piquetes u otros actos, que demostraron que todavía queda solidaridad, apoyo mutuo y dignidad.
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