Este fin de semana finalizaba la temporada de actuaciones en el Teatro Calderón con la última jornada de huelga de los técnicos y la sustitución ilegal de éstos por parte de la compañía de Leo Harlem.
La huelga de técnicos concluía este fin de semana con las actuaciones de Leo Harlem, cómico local cuya compañía ha contratado técnicos externos para sustituir a los trabajadores del teatro, intentando boicotear la huelga que sólo suponía un leve retraso en el comienzo del monólogo.
Sin embargo, y a pesar de esta lamentable vulneración de derechos laborales, desde la Sección Sindical del Teatro Calderón se quiere agradecer el calor y apoyo de gran parte del público, que informados de la situación decidieron solidarizarse retrasando lo más que pudieron su entrada a la función.
El piquete situado a las puertas del Teatro Calderón explicaba por megafonía los motivos de la huelga, así como la pasividad de los trabajadores ha llevado a esta situación social de más de seis millones de parados y un marco laboral cada vez con menos derechos: “hay dos tipos de trabajadores en este país, los que tienen problemas en el trabajo y los que los van a tener”. Cabe destacar el nutrido grupo de público que apoyó los paros de los trabajadores permaneciendo a las puertas, pese a que los encargados de las puertas instaban a la gente a entrar.
Pasados diez minutos, los técnicos agradecieron a las personas que dilataron su entrada su solidaridad y conciencia, dando muestras, una vez más, de su buena voluntad.
A pesar de la intención constante de la Sección Sindical de reunirse con la Fundación Municipal de Cultura y con la empresa Eulen para solucionar el conflicto, se cierra la temporada con la negativa a reconocer los derechos laborales de los trabajadores.