Con este comunicado, la CNT dará su postura ante aquellos trabajadores (y muchos liberados) que acudirán mañana a las 20.00h en Fuente Dorada a la inofensiva concentración convocada por los sindicatos del régimen.
Los trabajadores/as hemos olvidado que gracias a las luchas de nuestros antepasados hoy disfrutamos de unos derechos que nos quieren arrebatar. No debemos permitirlo.
Hemos olvidado lo que la lucha significa. Y debemos aprender de nuevo a pelear por nuestros derechos. Tenemos que exigir trabajo estable para cualquier persona, tenemos que defender la socialización de la riqueza, tenemos que luchar para que otro mundo sea posible.
Con la congelación de las pensiones, la rebaja salarial a los trabajadores/as del sector público y la inminente reforma laboral, lo que está en juego es el futuro más inmediato, es definir hacia dónde vamos y qué tipo de sociedad queremos.
Con este ataque a los derechos de miles de trabajadores/as del sector público se está dinamitando una de las bases sociales más importantes de este país, pues son los funcionarios quienes gestionan derechos fundamentales como la educación, la sanidad, cobro de prestaciones por desempleo y bajas laborales, subsidios, pensiones… Su trabajo repercute en un indudable beneficio social.
Todo el dinero que el estado destina a la sociedad llega al ciudadano gracias al trabajo de un colectivo largamente infravalorado e incluso vilipendiado.
El ataque contra los salarios de este amplio colectivo vuelve a ser un ataque a “lo público” que aún conservamos. Es un paso más en el desmantelamiento de lo social, que favorece el camino emprendido hacia la privatización de cuestiones tan básicas como lo son nuestra salud, la educación, o el cuidado de nuestros mayores.
El gobierno podría haber elegido otro camino y recortar gastos a quienes no generan ninguna riqueza social. Poner fin a la financiación de los sindicatos, de la banca y de la patronal, de la iglesia, poner más empeño en perseguir el fraude fiscal…. Podría, por ejemplo, aumentar el número de Inspectores de Trabajo, y que realmente hicieran una labor de vigilancia, para reducir tantos y tantos accidentes laborales que generan a su vez gastos sanitarios, prestaciones de incapacidad… etc, etc.
¿En qué sociedad queremos vivir?
La globalización de la especulación financiera y los tiburones de la bolsa han generado una crisis internacional con el consentimiento, cuando no colaboración, de los gobiernos. Y ahora estos mismos pretenden que seamos los ciudadanos de a pie, los pensionistas, los trabajadores/as, quienes reflotemos a la banca, para que puedan continuar con su actividad especuladora. Bajan el sueldo de sus empleados/as, nos suben a TODOS los impuestos, y abordarán una reforma laboral que, si permitimos que sea llevada a cabo, significará un gran retroceso para la totalidad de los trabajadores/as.
Ante todo esto hace falta que nos organicemos y aprendamos de nuevo a luchar. Tenemos que tomar conciencia de la importancia del trabajo que realizamos, independientemente de que este se desarrolle dentro o fuera del sector público. Es necesaria una organización de los trabajadores/as, al margen de los sindicatos subvencionados por el estado, y que no enfrente a unos colectivos con otros.
A luchar se aprende luchando. Y la mejor herramienta que tenemos es la huelga, pero no una huelga simbólica de uno o dos días…. Los trabajadores/as de antaño lo sabían y gracias a sus huelgas indefinidas tenemos hoy estos derechos.
Hace falta una huelga, una huelga general e indefinida
Y para quien piense que esto es utópico, que recuerde la huelga en los juzgados. Fue hace poco y lograron lo que querían. Y ¿qué pasaría si Hacienda se pone en huelga en plena campaña de declaración de la renta? Tenemos más poder del que creemos, pero hace falta que nos demos cuenta.
¡Huelga General! ¡Huelga Indefinida!