Chacho | Estoy viviendo en Chile (Valparaíso) y, como imagino que sabéis, en estos momentos el país vive una situación política y social extrema. Después de más de 30 años de democracia ladrona y asesina, de una democracia heredera de la misma política económica neoliberal que impuso la dictadura de Augusto Pinochet a sangre y fuego en 1973, la gente de a pie, trabajadoras y trabajadores, estudiantes, y la mayoría de la población que vive en la más grave y profunda precariedad han dicho basta, se han cansado; ya no se aguanta más tanta injusticia, ya no hay cómo esconder tanta misera para el pueblo y tanto desfalco de los poderosos (dueños del país). Algo que comenzó con una simple acción de desobediencia y evasión en el pago del billete del metro por parte de la masa estudiantil de secundaria por una subida de 30 pesos, prendió como la pólvora y la población, además de respaldar las acciones y peticiones de los estudiantes, elevaron sus protestas por tantos y tantos temas que durante todos estos años han ido cavando la dignidad del pueblo chileno:
- Jubilaciones de miseria para abuelas y abuelos que después de más de 40 años cotizando obtienen unas pensiones de menos de 200 euros de media, ya que son gestionadas por entidades ( AFP) privadas y estas tienen libertad para invertir y jugar con la plata de trabajadoras y trabajadores.
- Educación privatizada. La mayoría de las universidades son privadas y existe una masa grande de estudiantes endeudados por varios años (una media de 5 a 10 años) por la deuda contraída con los bancos.
- Sueldo base o mínimo de hambre: En Chile el sueldo mínimo es en estos momentos de 370 euros, y la mayoría de la población trabajadora cobra este sueldo teniendo que hacer horas extras o buscar otro trabajo para llegar a fin de mes. Para hacernos una idea los arriendos de casas o departamentos habitacionales rondan los 350-400 euros y el kilo de pan casi los dos euros.
- El medio ambiente: En Chile las grandes corporaciones de los sectores mineros, forestales, pesca y energéticas pertenecientes a las 7 familias dueñas del país, tienen vía libre para contaminar gratuitamente y hacerse dueñas de espacios públicos que pertenecen a toda la población. Así el estado les venden playas, ríos, montes… para que puedan explotar y contaminar con toda impunidad. Incluso se llega a asumir la contaminación como algo necesario y común, y llegan a llamarse a estos espacios » zonas de sacrificio», donde incluso la gente tiene que protegerse por el riesgo para su salud y los más pequeños deben dejar de ir al colegio por problemas respiratorios por gases contaminantes (metilcloroformo, isobutano y nitrobenzeno y otros).
- Asesinatos de militantes políticos , sindicales y de los pueblos indígenas: en los últimos años cada año mueren a manos de los cuerpos (asesinos y represores) del orden y la ley, trabajadores y trabajadoras, luchadores sociales, ambientales y guerreros de los pueblos originarios por luchar por sus derechos ( más de 30 luchadores anarquistas, sindicales, mapuches y sociales).
- Sanidad privatizada: En este país la sanidad de calidad y los fármacos son privados y excesivamente caros, la sanidad pública ha sido literalmente desabastecida y desvalijada con la finalidad de potenciar las clínicas privadas. Los medicamentos son pagados 100% por el contribuyente siendo 0 el aporte del gobierno para su adquisición.
- Los derechos de la clase trabajadora: En Chile hay una gran masa de trabajadores/as que son contratados a honorarios, esto quiere decir que aun siendo trabajadores/as asalariados efectivamente ( con horarios de entrada y salida, dependencia con la empresa, etc.) son considerados como independientes ( autónomos en España); esto lleva como desmedro para sus derechos que no se les considera dentro del Código del Trabajo y además tampoco tienen la posibilidad de sindicalizarse, estando totalmente desprotegidos ante la patronal -sobre todo, ante la falta de conciencia de clase y la posibilidad de organizarse.
- Corrupción: En los últimos años se han destapado diversos centros de corrupción político-económico donde los que mandan el país y lo que «defienden» la nación se han llenado los bolsillos robando al contribuyente, siendo salvados por sus jueces.
- Memoria: Médicos, cómplices, asesinos y torturadores de la DINA , la CNI y del ejército que fueron acólitos del golpe de estado del 73 caminan libremente y trabajan en sus clínicas sin ser juzgados por la justicia del país o en el mejor de los casos están recluidos en prisiones de lujo (Punta Peuco), mientras a los luchadores sociales, indígenas y sindicales les aplican la ley anti terrorista por protestar.
El Chile pobre, precario, trabajador y humilde se ha levantado y ya se echó a la calle, no quiere callar más y por eso el gobierno fascista de Sebastián Piñera, incompetente, inoperante y, sobre todo, soberbio, ha echado a la calle a los militares y ha declarado el estado de emergencia y el toque de queda en varias regiones (Metropolitana, Valparaíso, Tarapacá, Coquimbo,Maule, Biobio, O´Higgins, Los ríos y Los lagos), con vistas a declararlo en todo el país. Hasta ahora llevamos 11 muertos contabilizados por balas de los soldados y más de 1180 detenidos/as en tres días. Además hay que apuntar que hay varias mujeres que han sido abusadas y vejaciones sexuales por personal del ejército y de carabineros; también hay denuncias de torturas, desnudamientos y abusos a menores.
La estrategia del gobierno es la de publicitar los saqueos (sospechosamente permitidos por las propias fuerzas del estado) a los comercios para justificar el uso del ejercito y conseguir el apoyo por una parte de la población (la más humilde y despolitizada), e intentar vaciar las demandas de la gente que lucha por cambiar el sistema neoliberal, es decir llegar al » divide y vencerás».
Por todo esto arriba expuesto quiero pedir fraternalmente apoyo a esta gran y querida organización que es la CNT y a todas las que estén dispuestas a luchar junto con el pueblo humilde y guerrero de Chile y que se encuentra en unos momentos extremos que, si bien puede que cambien el rumbo de la historia del país, el costo que están teniendo es altísimo.
Por favor moverse en embajada, consulado y otros organismos chilenos en España exigiendo la retirada del ejército de la calle, fin del toque de queda y renuncia del presidente Sebastián Piñera Echeñique, asesino del pueblo. Todo lo que se pueda hacer será bienvenido y agradecido.
¡¡¡Salud y libertad!!! ¡¡¡No nos harán callar ni con balas!!!